Hoteles en Montpellier

Montpellier, situada en el sur de Francia, en la región de Occitania, cuenta con una población de casi 290.000 habitantes y es una de las ciudades más sorprendentes de la zona. Relativamente joven, se trata de una población de indudable elegancia, repleta de barrios con encanto y personalidad, bulevares distinguidos, edificios señoriales y callejuelas misteriosas y sugerentes. Es una ciudad ideal para recorrer de día y de noche, para perderse en ella y para enamorarse de su arquitectura.

Alojamientos en Montpellier

En lo que a alojamientos se refiere, Montpellier tiene mucho que ofrecer. Como en otros destinos, podremos hospedarnos en hoteles como el Hotel Mercure Montpellier Centre, que nos ofrece habitaciones bien decoradas, está adaptado para personas con movilidad reducida y admite mascotas, pero también tenemos otras opciones distintas. Citadines Antigone Montpellier, por ejemplo, es un hotel que nos ofrece apartamentos y estudios completos, con cocina y servicio de lavandería. Por otro lado, Appartments Lagrange City Résidence du Château es una residencia situada junto a un centro comercial y que cuenta con piscina y sauna.

Mejor manera de moverse por Montpellier

A la hora de desplazarnos por la ciudad, Montpellier nos lo pone fácil porque, aunque es una ciudad de tamaño mediano, la mayoría de los puntos turísticos se encuentran más o menos cerca y es posible desplazarse a pie. De todos modos, la ciudad cuenta con autobuses y una cómoda red de tranvías muy vistosos. Por otro lado, también se nos ofrece un servicio de alquiler de bicicletas, por lo que hay diversas opciones a elegir.

Cuándo es mejor viajar a Montpellier

En general, el clima de Montpellier suele ser bastante agradable. Pero si queremos saber cuál es la época más idónea para visitar la ciudad, sin duda será la que comprende desde marzo hasta noviembre. En esta época, las temperaturas son templadas y cálidas, y hay poco riesgo de lluvia.

Qué ver y hacer en Montpellier

Aunque Montpellier no es tan antigua como otras ciudades del sur de Francia, sigue siendo una urbe elegante y distinguida con mucho que ofrecer a la hora de visitarla. Así, nuestra visita puede comenzar por la Place de la Comédie, en el centro del casco antiguo. Dicha plaza, construida en el siglo XVIII, es uno de los espacios peatonales más grandes no solo de Francia, sino de toda Europa. Es el punto de partida ideal para visitar la ciudad, o para detenerse a tomar algo en una terraza. Allí, además, podemos encontrar el edifico de la Ópera, cuya fachada imita la de París. Otro punto interesante a visitar puede ser la Torre de Babotte, uno de los restos de la antigua muralla del siglo XIV que protegía la ciudad. Desde el siglo XVIII, la torre alberga el Observatorio Astronómico de la Academia de las Ciencias. Por otro lado, también podemos visitar la Catedral de San Pedro, levantada por orden del Papa Urbano V. Junto a la catedral se encuentra la Facultad de Medicina, supuestamente la facultad más antigua del mundo, y donde estudiaron figuras tan célebres como Nostradamus o Ramon Llull. Por último, podemos pasear por algunos barrios interesantes de la ciudad, como el de Antigone, un barrio de estilo clásico con reproducciones de estatuas de épocas romana y griega, todo ello obra del arquitecto Bofill. O el Barrio de Saint-Anne, donde hay una antigua iglesia neogótica reconvertida en un lugar de exposición de arte contemporáneo. Pero no podemos marcharnos de la ciudad sin probar la gastronomía del lugar. Estamos en Francia, después de todo, y en Montpellier podemos encontrar multitud de bistrots donde podremos comer la mar de bien o celebrar nuestra última noche en la ciudad con una cena de primera. Montpellier es una ciudad especial. Si la visitas, si te dejas conquistar por la magia de sus calles, sin duda querrás volver.